“El síndrome metabólico es un grupo de condiciones que te ponen en riesgo de desarrollar una enfermedad cardiaca y diabetes tipo 2”
El síndrome metabólico consiste en una serie de factores considerados como precursores de enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2. Fue descrito por primera vez en el año 1923 por el médico sueco Kylin, que describió la asociación de hipertensión arterial, hiperglucemia y gota. En 1936, Himsworth, propuso la existencia de dos tipos de diabetes una sensible y la otra insensible a la insulina. Marañón también hizo la misma asociación y además señalo que la hipertensión arterial es un factor que predispone a padecer diabetes.
Actualmente existen varias definiciones del Síndrome Metabólico, las cuales tienen criterios de diagnóstico diferentes. Una de estas definiciones es la de la Organización Mundial de la Salud. Según esta, para padecer el síndrome metabólico hay que padecer diabetes, glicemia alterada en ayunas, intolerancia a la glucosa, resistencia a la insulina por HOMA y al menos 2 de los siguientes criterios:
- Relación cintura/cadera >0.9 en el hombre, >0.85 en la mujer.
- Triglicéridos ≥150 mg/dl o colesterol de lipoproteínas de baja densidad <35 mg/dL en hombres y <39 mg/dL en mujeres.
- Tasa de excreción de albumina en orina >20µg/min.
- Tensión Arterial ≥140/90 mmHg
De forma que con ser diabético tipo 2 con glicemia alterada en ayunas, hipertensión arterial y colesterol ya podemos ser diagnosticados con un síndrome metábolico.
En Europa, la prevalencia del síndrome metabólico en niños es variable, desde un 33% en el Reino Unido hasta un 27 y 9% en Turquía y Hungría. Un estudio realizado en España estimó que la prevalencia en nuestro país es de un 17-18% en la población pediátrica con obesidad moderada.
Tratamiento de la medicina occidental para el síndrome metabólico
El tratamiento occidental para el síndrome metabólico está basado en el tratamiento farmacológico.
Las estatinas y fibratos tienen propiedades antiateroscleróticas y antitrombóticas. Con su uso se mejora el perfil aterogénico, la reactividad vascular dependiente de endotelio y la sensibilidad hepática a la insulina.
La metformina se emplea como antidiabético para mejora la sensibilidad a la insulina con efectos favorables adicionales sobre el perfil lipídico al reducir los niveles de colesterol y triglicéridos.
Los inhibidores de enzimas convertidoras de angiotensinas y los bloqueadores de tipo I de la angiotensina II se recomiendan como antihipertensivos en los pacientes con síndrome metabólico al producir vasodilatación y disminuir los niveles de noradrenalina circulantes, lo que origina un incremento en la sensibilidad a la insulina y disminución en los niveles de insulina circulante.
El síndrome metabólico en la Medicina Tradicional China
Para la Medicina Tradicional China el síndrome metabólico está relacionado directamente con una del Bazo, el Hígado y el Riñón.
La obesidad se inicia con una Deficiencia de Qi, del bazo y riñón. El Bazo es el encargado de transformar y transportar los alimentos a todo el organismo, al estar en deficiencia la función de transformación se ve afectada y comienza a producirse flema y humedad.
El Riñón es el encargado de realizar los procesos metabólicos de los líquidos y la insuficiencia del Qi de Riñón puede provocar un estancamiento de líquidos y se transforman en flema.
En cuanto al hígado, una de sus funciones más importantes es la transformación de nutrientes, el metabolismo de los lípidos y de los hidratos de carbono. Si se produce una deficiencia de Hígado esta función va a verse afectada y se acumularan más grasas en el cuerpo.
Los síntomas más comunes de una acumulación de Flema y Humedad son:
- Obsesión por los dulces.
- Opresión y distensión torácica y gástrica.
- Suele acompañarse de aversión al calor.
En cuanto a los síntomas de la Insuficiencia de Qi:
- Sobrepeso u obesidad
- Desgana de hablar.
- Sudoración al mínimo esfuerzo.
- Aversión al frío.
- Cara y extremidades inflamada.
- Cansancio psíquico.
- Preferencia por permanecer acostado
Una vez realizada la anamnesis y la diferenciación de síndromes se seleccionan los puntos de acupuntura que se van a emplear en cada paciente, ya que no existen las recetas de puntos de acupuntura para tratar a todo el mundo de la misma forma.
Se trata, simultáneamente, la obesidad, la hipertensión y la diabetes con diferentes técnicas de la Medicina Tradicional China, pero obligatoriamente tenemos que acompañarlas con cambios en los hábitos de vida, como modificaciones en la dieta, aumentar la actividad física, abandonar el consumo de alcohol y tabaco.
El tratamiento de acupuntura se puede combinar con auriculoterapia para prolongar el tratamiento realizado en la consulta durante toda la semana. Consiste en la colocación en la oreja de una pequeñas agujas o semillas que deberán retenerse durante toda la semana. Si desea más información sobre la auriculoterapia puede consultar la siguiente dirección http://madridacupuntura.com/index.php/portfolio-item/auriculoterapia/
También podemos combinarlo con la estimulación del dermatoma T6 retrasando el vaciado del estómago y produce un descenso en la producción de Grelina, con lo que reducimos la ansiedad por la comida.
Si desea más información sobre la estimulación del dermatoma T6 puede consultar la siguiente dirección:
Ampliar información.
Y para reducir la grasa localizada podemos aplicar electrolipólisis en zonas localizadas.
Fernando López Sánchez
Telf. 644 19 11 19
www.madridacupuntura.com
Asociado COFENAT nº 5603