La Esfera del Renacimiento

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Hoy, quiero presentarles, con gran alegría interior, esta nueva energía Consciente y Divina de la Esfera del Renacimiento.

La Esfera del Renacimiento cierra un ciclo y abre otro. Es el cierre de la integración de las energías que nos han ido transformando para integrarnos y fusionarnos totalmente con nuestra Alma. En este proceso, cada persona ha ido teniendo distintas experiencias para disolver todo lo que no estaba en armonía con el Ser.

Las Esferas de Melchizedek nos han ido llevando por un proceso de profunda transformación para ahora poder sostenernos totalmente desde el Alma.

Con la Rosa Sagrada se inició el camino de la Unidad e integración de todo nuestro Ser, llevándonos al reconocimiento de nuestra Divinidad Interior; continuamos con la esfera de la Llama Gemela para recordarnos que desde nuestro corazón no existe separación con nuestra Llama Gemela, que todos somos Seres completos y Divinos y que cuando integramos y equilibramos nuestras energías masculinas y femeninas podemos sostener relaciones luminosas manifestándose el Amor Divino en la tierra.

Pasamos por la energía de la Sexualidad Sagrada, recordándonos la Divinidad de este acto Sagrado y sanando toda la manipulación que ha habido a lo largo de los años, pues cuando la sexualidad entre dos personas es desde el amor Divino, la pureza y limpieza mental, la energía más elevada de nuestra Divinidad se manifiesta a través de nosotros fundiéndonos con todo el Universo.

Así mismo se materializó el Portal de la Llama de la Eternidad para el recuerdo de que somos Seres Divinos y Eternos, tomando consciencia de que el tiempo es una creación de esta dimensión y que el único tiempo real es ¡el aquí y ahora!

Y por último y para finalizar este ciclo de transformación consciente llegó la esfera del Templo Divino para la sanación de nuestro cuerpo físico. Esta esfera nos lleva a tomar plena consciencia de que nuestro cuerpo es nuestro Templo Divino, es el vehículo que utiliza nuestra Alma para llevar a cabo nuestro plan Divino en esta tierra. Para ello debemos amarlo incondicionalmente, debemos sanar todo lo que no está en armonía con él y es por eso que muchas personas están pasando por procesos fuertes de enfermedad, pues es una de las vías que tiene el Alma para que las personas puedan ir más a su interior y empiecen a sanar todo lo que está en desarmonía con su propio Ser y puedan reconocer al cuerpo como Sagrado.

Una vez hemos integrado todas las energías anteriores en nuestro Ser, y hemos llevado a nuestro cuerpo físico por un proceso de sanación y limpieza profunda, nuestra alma se manifiesta totalmente y es ahí cuando empieza el proceso del RENACIMIENTO.

Ésta nueva esfera del Renacimiento abre el camino de la manifestación de nuestra alma. Ahora es nuestra alma quién dirige nuestras vidas pues ya hemos pasado por el proceso de la transformación de las energías que no estaban en armonía con nuestra Divinidad. Ya hemos reconocido y trascendido nuestro Ego, ya hemos pasado por múltiples procesos de transformación que nos ha llevado a la fusión consciente con nuestra Divinidad.

Ésta nueva esfera nos da la llave para abrir los caminos del Alma, comienza un nuevo ciclo Luminoso de manifestación consciente en donde seguiremos purificándonos, pero desde ¡la alegría del Ser!

Esta esfera también es la representación y manifestación de la Rosa de los Vientos que nos dice:

“La Rosa de Los vientos marca el inicio de un nuevo ciclo alquímico, en el cual el alma ha llegado en su viaje al punto final. (Alfa y Omega).

En este nuevo nacimiento o nuevo renacer espiritual se rompen las cadenas kármicas que sujetaban al alma a vivir en la separación del SER.

El ALMA es liberada del inframundo para unificarse en la TOTALIDAD del SER, en un solo ser dentro de la consciencia de UNIDAD). 

En la totalidad del SER el alma es el UNO indivisible dentro de la TRINIDAD. Padre, hijo y espíritu santo. (Tercera trinidad alquímica).

La Rosa de los vientos, es una autoridad espiritual que rompe el efecto espejo que produce la ANTITESIS (primeras dos trinidades alquímicas); para llegar a la TESIS en la tercera y última trinidad alquímica. 

En este nacimiento se lleva la unidad de las energías duales del ser, en donde lo femenino es igual que lo masculino…Donde lo de arriba es igual que lo de abajo, donde lo de adentro es igual que lo de afuera”.

Comienza la etapa luminosa del Alma, celebrémoslo desde la ¡GRATITUD INFINITA DE QUE EL TIEMPO HA LLEGADO!

¡DESDE LO MÁS PROFUNDO DE MI DIVINIDAD DOY LAS GRACIAS POR ÉSTE GRAN REGALO Y LES ÁNIMO A QUE SE COMBIERTAN EN ESA ROSA DE LOS VIENTOS, EN ESE RENACIMIENTO!

Fátima Ávila Santana
Más información sobre los Cristales de Melchizedek: www.aumkabah.es
Telf. 649 14 21 25 – info@aumkabah.es

 

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